El Juzgado de lo Penal número 1 de Badajoz ha condenado a F. J. M. a seis meses de prisión por un delito de intrusismo profesional, del que fue acusado por la Fiscalía y por el Colegio de Dentistas de Extremadura. Así consta en la sentencia, que es firme por haberse anticipado en el acto del juicio.

El juez considera probado que «desde 1996, y en todo caso desde abril del 2012, el acusado, en un inmueble carente de autorización administrativa y publicitado como consulta de protésico dental, siendo ésta la profesión que se atribuía, realizaba toma de medidas y colocación de prótesis dentales, intervenciones que le estaban vedadas por corresponder en exclusiva a odontólogos, estomatólogos o cirujanos maxilofaciales, títulos académicos de los que carecía». Tampoco consta que tuviera título oficial para ejercer la actividad de protésico dental, segúin la sentencia.