Santiago del Valle, acusado de la muerte de la niña onubense Mari Luz Cortés, fue sido condenado ayer en Gijón a dos años y seis meses de prisión por sendos delitos de abuso sexual con reincidencia y coacciones a una menor.

Ayer se celebró en el Juzgado de lo Penal número de Gijón la vista de conformidad en la que compareció como imputado Santiago del Valle por acosar a finales del 2006 a una menor de 13 años en esta ciudad a la que había conocido a través de una revista, informó el Tribunal Superior de Justicia de Asturias (TSJA).

Según el fiscal, el presunto autor de la muerte de Mari Luz Cortés contactó con la adolescente a principios del 2006 a través de un mensaje incluido en una revista haciéndose pasar por una niña de 13 años y trasladó su domicilio de Sevilla a Gijón.

Del Valle llegó a acudir al domicilio de la menor para entrevistarse, sin que se lo permitiera su madre, con ella, que cursaba sus estudios en el Instituto Mata Jove, en el que el acusado se matriculó en un curso de educación para adultos. Entonces empezó a seguirla, le hizo proposiciones sexuales y la invitó a acudir a un hotel.