EL SUELDO. Desde finales del 2009, el ministro de Fomento, José Blanco, emprende una cruzada para denunciar los sueldos abusivos (que rondaban los 350.000 euros de media) de los controladores y se propone modificar sus condiciones de trabajo.

LA LEY. Al no lograr un acuerdo, el Gobierno aprueba un decreto que reduce los tiempos de descanso; las horas extras que pueden hacer y crea los servicios exprés.

EL AVISO. Hace 10 días, Blanco avisa de que, frente a la proliferación de bajas, pedirá a la Seguridad Social que las investigue y anuncia que prepara militares para que asuman sus funciones.