El concejal del distrito barcelonés de Ciutat Vella, Carles Martí, negó ayer que proliferen en la ciudad minipisos a precios muy altos, como los que anuncia algún portal inmobiliario, y aseguró que el ayuntamiento ya actúa contra ellos inspeccionando y llevando el caso ante la justicia, si es necesario.

Tras trascender que un portal anuncia un piso de 11 metros cuadrados en el barrio del Raval por 82.000 euros, y otro de 16 metros en el Poble Sec que se vende por 120.250 euros, Martí ha subrayado que estos pisos infringen la ley, ya que no pueden existir viviendas de menos de 30 metros cuadrados, por lo que no cuentan con cédula de habitabilidad.

El concejal explicó que estos pisos se ponen a la venta en muchas ocasiones haciéndolos pasar por estudios sin cocina, que no están pensados como una vivienda permanente, sino como un lugar de trabajo.

Cuando el consistorio tiene conocimiento de un caso de minipiso como vivienda habitual, se lleva a cabo una inspección y se levanta acta para evitar que se use de forma ilegal, si el caso persiste puede llegar a manos de un juez.