Comenzó con dieciséis años musicando a poetas como León Felipe, Octavio Paz y Blas de Otero. Hoy, muchos músicos se han acercado a su "diario" para poner música a los poemas. Luis Pastor recrea la mirada por sus orígenes con Soy , retrato de a una generación extremeña que, como él, emigró un día. El cantautor de Berzocana presenta hoy en el Gran Teatro de Cáceres su último disco, arropado de Juan y Domingo Vargas, que harán suyas las canciones de este afromeño. El recorrido musical de Luis Pastor es muy extenso y variopinto. Muchos recuerdan aún al ciego que con unas gafas de sol aplaudieron los españoles en los ochenta.

¿Cómo recuerda aquello?

--Me convertí en el músico más famoso de los hogares de este país. Incluso venían las revistas del corazón a mi casa. Cantaba canciones que hablaban de la situación política del momento.

¿Cómo entiende los cambios socio-políticos que ha vivido su generación?

--Somos una generación que no responde a las expectativas que nos motivaban para dar horas de nuestro tiempo a la solidaridad y a la lucha contra la dictadura. Luchábamos por unos cambios que se han quedado únicamente en un cambio de escaparate. No creamos ese hombre nuevo que queríamos.

¿Cree en Dios?

--Creo en un alma, en un espíritu colectivo de energía que es nuestra madre naturaleza.

¿Cuando logró su grado de espiritualidad más alto?

--Al volver la mirada a la naturaleza de mayor. Cuando he necesitado mirar a mis orígenes fruto de los años y la edad. Cuando vuelvo a Berzocana y me reencuentro con el paisaje y la memoria que me trae los recuerdos de infancia y los olores del huerto y de la retama.

¿Qué ve cuando se mira en el espejo?

--Ahora me veo a mí mismo, pero tuve etapas de mirarme y no conocerme. Durante nuestras vidas asistimos a muchas muertes de nuestra energía y de nuestro físico.

¿No se siente desnudo publicando su diario?

--Mi profesión consiste en desnudarse. Uno se desnuda cuando está en el escenario y se vacía de sus sentimientos, de su soledad, de su alegría, de sus tristezas, de sus emociones... Mi diario es un referente para no olvidar mis vivencias.

Podría hablarse de sus diarios como una propuesta diferente a la de sus compañeros de profesión.

--Los cantautores somos mundos diferentes por más que nos hayan metido a todos en el mismo saco. Tenemos influencias musicales y culturales muy diversas. A veces tengo más que ver con alguien que no es cantautor que con otros cantautores. Mi propuesta es muy diferente de la de otros aunque todavía me tienen encasillado por el que fui y muchos no se han parado a escuchar mis nuevos trabajos.