Criar a un hijo hasta que cumple los 18, cuesta entre 98.205 y 310.274 euros. Son las cifras de un informe elaborado por la Confederación Española de Amas de Casa, Consumidores y Usuarios (Ceaccu), hecho público ayer. Son cifra que impresionan. Si se prefieren por años, las medias oscilan entre los 5.455 y 16.737 euros. La educación, tras el aumento de las becas y ayudas, ya no es el capítulo que más desequilibra los presupuestos familiares. No obstante quienes prefieren la enseñanza privada gastan hasta siete veces más que los que se deciden por la pública (34.540 euros frente a 4.470).

El estudio --realizado sobre 400 hogares de distinto nivel social de toda España-- revela que el coste mínimo de subir a un hijo ha aumentado un 25% con respecto al 2000, año en que se realizó una investigación similar. "Los salarios han subido una media del 15% en estos seis años, lo que significa que el esfuerzo familiar actual es de al menos un 10% mayor", calculó la presidenta de Ceaccu, Isabel Avila.

También quiso dejar claro que "en modo alguno se pretende aterrorizar a parejas que estén en edad de procrear", sino poner de manifiesto la escasez de ayudas a la familia, que se sitúan a la cola de las aplicadas en la mayoría de los países de la UE. La cantidad exenta de tributación en el IRPF es 1.400 euros por el primer hijo, 1.500 por el segundo, 2.200 por el tercero y 2.300 por el cuarto.

Según el estudio, el gasto comienza antes del parto y empieza a dispararse con las leches infantiles, pañales, cosméticos y cochecitos. Solo el primer año han de gastar un mínimo de 7.132 euros. Con cuna, guardería y bautizo, hasta 11.238.

En la etapa que va de los 12 meses a los 3 años los gastos que se refieren a alimentación y a ropa son los principales. Aunque el hijo adopta los hábitos alimenticios de la familia, se siguen comprando productos más caros y leches más caras. Así el coste medio en es, como mínimo, de 2.900 euros. Hay que tener en cuenta que entre el primer y tercer año se siguen comprando pañales. Entre los 3 y los 12 años baja los costes alimenticios, pero en cambio aparecen otros nuevos relativos al ocio. Llega la celebración de la comunión, los videojuegos e incluso el teléfono móvil. En la etapa de los 12 a los 16 años el mayor incremento se produce en ropa y calzado.