Asociaciones de automovilistas consideraron ayer positiva la nueva dotación de los vehículos de la Guardia Civil de tráfico, pero Automovilistas Europeos Asociados (AEA) advirtió del riesgo de que los guardias civiles patrullen solos.

El director de AEA, Mario Arnaldo, declaró que la mejora en los medios y en la dotación de los nuevos vehículos es positiva, pero "la separación de las parejas de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil no es la solución".

Se debería aumentar el número de agentes y contar con entre 12.000 y 15.000 guardias civiles en las carreteras, indicó Arnaldo, ya que, a su juicio, la presencia de los agentes es un factor importante en la prevención de accidentes de tráfico, como se ha demostrado en Francia donde el aumento de la presencia de policías en las vías redujo la siniestralidad.

El parque de vehículos ha aumentado cada año. pero el número de agentes de tráfico de la Guardia Civil se mantiene estancado en 8.500, recordó Arnaldo. El director de AEA considera que dividir a la pareja de la Guardia Civil puede conllevar un riesgo para su seguridad personal, y recordó algún caso de enfrentamiento con terroristas.

Por su parte, el Real Automóvil Club de España (RACE) considera que si las patrullas unipersonales de la Guardia Civil dan una mayor seguridad vial será un buen sistema, aunque se mostró "expectante ante los resultados". El portavoz del RACE, Diego Azúa, se mostró positivo con el sistema e indicó que "si va a haber mayor vigilancia, que no significa más sanciones, sino prevención y seguridad vial, es un buen sistema".