Los investigadores RyC no son becarios en formación, sino profesionales granaditos con amplio currículo y a menudo con familia a cuestas. En su lugar de trabajo pueden desarrollar líneas de investigación propias --de acuerdo con las necesidades del centro de acogida-- y a menudo imparten créditos universitarios y tienen a su cargo grupos de becarios.

En el primer año se ofrecieron 800 plazas RyC, aunque la cifra se redujo en los dos cursos posteriores y ahora son, contando las tres promociones, cerca de 2.000 investigadores. Entre el colectivo hay también algunos extranjeros, al no estar restringida la convocatoria a españoles.