La familia de la joven irlandesa de 15 años Amy Fitzpatrick, desaparecida desde el martes en Mijas (Málaga), ha pedido ayuda a los ciudadanos españoles y la comunidad británica residente en la Costa del Sol para tratar de localizarla, ante el temor a que alguien la retenga contra su voluntad.

La madre de la joven, Audrey, ofreció ayer una rueda de prensa en la que hizo un llamamiento a los ciudadanos para que traten de recordar si vieron la noche de su desaparición, el pasado día 1, a una joven caminando sola en los alrededores de la urbanización Calypso, donde fue vista por última vez.

"Una chica no desaparece de la faz de la tierra", señaló Audrey, que ha añadido que sus familiares están "destrozados" y cada día que pasa "más preocupados de que algo le haya pasado".

También lanzó un mensaje a su hija, en el caso de que haya decidido marcharse voluntariamente, al pedirle que vuelva y afirmar: "Tu hermano Dean te echa de menos y todos te queremos mucho".

En la comparecencia, en la que la madre se dirigió a los periodistas en inglés, se distribuyó material con tres fotografías de la joven, que desapareció cuando se dirigía desde el domicilio de una amiga, en el que había trabajado como niñera, hasta su vivienda. Aparece con el cabello moreno, como lo llevaba el día que desapareció, y en una antigua está con el pelo rubio.