La Policía Nacional detuvo en La Jonquera (Girona) y Caspe (Zaragoza) a los nueve miembros de una organización internacional dedicada al robo de mercancías para distribuirlas en Europa y cuyo último golpe fue robar 76 motores en Barcelona. Según informan las fuerzas de seguridad en un comunicado, la banda estaba asentada en la capital aragonesa, sin embargo actuaba en todo el territorio nacional.

En la operación, los agentes pudieron recuperar los 76 motores robados en L'Hospitalet de Llobregat (Barcelona) cuando eran trasladados a Madrid con el fin de comenzar allí su distribución a diferentes países del continente. Las máquinas se encontraban en un contenedor que llevaba un camión de transporte pesado.

Fue el robo de estos motores lo que llevó a la policía a iniciar una investigación el pasado mes de julio. En concreto, los agentes tuvieron conocimiento de que los motores fuera borda viajaban en un contenedor de origen japonés que había llegado al Puerto de Barcelona y posteriormente iban a ser trasladados a la capital de España. Los investigadores localizaron entonces una nave industrial en Barber del Valls donde los ladrones tenían depositados parte de los motores sustraídos. De este modo, se estableció un dispositivo con el que el pasado 27 de julio se comprobó que dos de los arrestados cargaban en una autocaravana los motores fuera borda y emprendían un viaje a Caspe (Zaragoza). Desde esta localidad los arrestados habían organizado otro envío destino la Jonquera donde fueron interceptados y detenidos se intervinieron un total de 21 motores.

OTROS SIETE DETENIDOS EN CASPE Posteriormente, a la altura de Lleida, los policías detectaron otra autocaravana con matrícula checa, que se dirigía a la nave industrial de Caspe y fue interceptada, La Policía arrestó a los tres ocupantes e intervinieron 29 máquinas de las mismas características. El resto de motores fue recuperado en un anexo de la nave de la ciudad aragonesa, donde se arrestó a cuatro personas más.

Todos los detenidos, en total nueve, son miembros de la una organización internacional, asentados en la provincia de Zaragoza, que se dedicaban al robo y posterior venta de objetos y disponía de una red de contactos a nivel europeo capaz de deshacerse con relativa facilidad de los efectos que sustraían.