La Policía Nacional ha desarticulado un grupo organizado altamente especializado en la clonación de tarjetas bancarias a partir de datos procedentes de China y que presuntamente estafó más de 40.000 euros en compras. La policía ha arrestado a 12 miembros de la red en Barcelona, Tarragona, Lérida, Elche y Bilbao que utilizaban las falsificaciones para realizar compras fraudulentas en establecimientos comerciales de diferentes localidades de España.

Los datos bancarios empleados para la elaboración de las copias fraudulentas eran obtenidos en China y luego eran distribuidos por diversos países europeos y norteamericanos. Una vez elaboradas, los miembros de la red las utilizaban, junto con pasaportes también falsos, para comprar todo tipo de artículos que más tarde serían revendidos

Según fuentes policiales, los estafadores utilizaban las falsificaciones para realizar las compras que luego revendían en comercios de toda España, siempre siguiendo el mismo modus operandi: un "pasador" hacía las compras con tarjetas y documentación falsificada y un "controlador" vigilaba desde el exterior para alertar si había presencia policial.

La investigación se inició a raíz de una denuncia de un ciudadano en una comisaría de Santander alertando de que se había cometido un fraude con su tarjeta por 4.000 euros en varios establecimientos de Tarragona, donde se habían realizado compras aunque su tarjeta nunca había sido robada ni se había extraviado.

DECOMISO DE DINERO, JOYAS Y TARJETAS

Los agentes finalmente localizaron en Tarragona a una pareja de nacionalidad española y a un ciudadano chino, presuntos autores de dichas compras, que acabaron detenidos junto con el resto de integrantes de la red.

En la operación se efectuaron registros domiciliarios en Lleida, Bilbao y Elche, donde se intervinieron 10.000 euros en efectivo, 13 ordenadores, un lector-grabador para la clonación de tarjetas y otros componentes informáticos, 14 discos informáticos de almacenamiento externo, teléfonos móviles y 26 tarjetas de crédito presuntamente falsificadas, cámaras fotográficas y de vídeo, joyas y abundante documentación relacionada con las actividades ilícitas.

La operación, que continúa abierta, ha sido realizada por agentes de la UDEF de la Comisaría Provincial de Tarragona y el Grupo Tercero de la Sección de Delincuencia Económica de la Brigada Provincial de Policía Judicial de Barcelona, en colaboración con investigadores de las comisarías de Lérida, Bilbao y Elche (Alicante).