La Policía ha desarticulado las mafias que controlaban la prostitución china en Madrid, con la detención de catorce personas, entre los que se encuentran los máximos responsables de las seis organizaciones que operaban en la capital.

Además, y según informó la Jefatura Superior de Policía de Madrid, en la operación se han detenido veinte de las cerca de cien mujeres que trabajaban para las distintas organizaciones, en aplicación de la Ley de Extranjería.

Los delincuentes, todos ellos de nacionalidad china, se servían de anuncios en prensa de tirada nacional, tanto para captar a los clientes como a las mujeres, para cuya selección se valoraba el que tuvieran un aspecto aniñado, y se calcula que cada una de las seis sedes atendían una media de 60 clientes diarios y obtenían unos beneficios anuales que rondaban los 14 millones de euros.