Uno de los vagones del tren Talgo que cubre la línea Gijón-Barcelona descarriló hoy en la estación de León cuando realizaba una maniobra de acoplamiento con otro convoy, que tenía el mismo destino y procedía de A Coruña, sin que el accidente causara daños personales entre los pasajeros que viajaban a bordo. Así lo confirmó a Efe un portavoz de Renfe, quien detalló que el suceso ocurrió en torno a las 13.20 horas cuando el convoy procedente de Gijón circulaba marcha atrás para unir sus coches al resto, que habían llegado con anterioridad desde A Coruña.

La misma fuente explicó que sólo uno de los ejes del vagón se desencajó de los raíles, puesto que "la escasa velocidad con que se realizan este tipo de maniobras" impidió que el descarrilamiento fuera mayor. Los 52 pasajeros del convoy siniestrado fueron conducidos al otro conjunto de vagones y emprendieron la marcha, con una hora y media de retraso, con destino a Barcelona.

Según el portavoz de Renfe, el servicio ferroviario de la estación de León no se vio afectado por el accidente, ya que las instalaciones cuentan con varias vías por las que pudieron circular los trenes que pasaron por la capital hasta que el vagón fue encarrilado.