Las estafas a inmigrantes han dado un preocupante salto cuantitativo. Así lo ha constatado el Cuerpo Nacional de Policía, que ha desmantelado una red de estafadores colombianos que engañaron a unas 3.000 personas con contratos de trabajo ficticios. Según la policía, es la mayor estafa a inmigrantes descubierta este año. La documentación confiscada apunta a que la banda ganó cerca de un millón de euros.

La organización estaba integrada por ocho personas, cuatro mujeres y cuatro hombres, que habían constituido una empresa que se ofrecía a regularizar extranjeros en España a cambio de sumas que oscilaban entre los 1.600 y los 2.000 euros. Sin embargo, los prometidos papeles nunca llegaban, y los inmigrantes acababan perdiendo el dinero.

La red operaba entre Barcelona y Valencia y captaba a sus víctimas mediante anuncios en prensa, radio y televisión, incluso ofrecían sus servicios en encuentros de la comunidad colombiana en España. La información que puso a los agentes en alerta llegó cuando un individuo denunció, ante una comisaría de Jaca, la existencia de una web que ofrecía regularizar a extranjeros en España. Los afectados debían pagar más de 2.000 euros para poder conseguir unos papeles que nunca llegaron.