Al menos doce personas murieron ayer tras el desplome del techo del Centro Internacional de Exposiciones de la ciudad de Katowice, informó la oficina de prensa del gobernador de la provincia de Silesia, en el sur de Polonia.

El número de heridos acogidos por los hospitales de la zona superaba anoche ya el centenar, mientras que las personas atrapadas bajo los escombros serían también más de cien, según estimaciones de la policía al cierre de esta edición.

En el rescate participan 70 equipos de bomberos y 200 policías, así como grupos de especialistas en rescate minero de las explotaciones de hulla cercanas al lugar del accidente.

La policía y los expertos consideran que la causa más probable del hundimiento del techo de la nave --en la que unas 700 personas participaban en una exposición de palomas mensajeras-- fue el peso de la espesa capa de nieve que se acumulaba en el tejado.

Los jefes de la operación de rescate afirman que en el transcurso de las próximas doce horas serán desenterradas todas las personas todavía sepultadas, estén o no con vida.

Los bomberos y policía temen que las heladas, con temperaturas de 12 grados bajo cero, puedan ser mortales para las personas atrapadas entre los escombros.