Efectivos del Cuerpo Nacional de Policía han detenido en Bilbao a la propietaria de un establecimiento hostelero que pagaba a sus empleadas extranjeras, alguna de ellas en situación irregular, 230 euros al mes por jornadas de trabajo de ocho horas diarias, que se ampliaban a quince los sábados. Según han informado hoy fuentes de la delegación del Gobierno en el País Vasco, la detención de la mujer identificada con las iniciales M.C.A.A., de 58 años y nacionalidad española, se produjo el pasado día 6 de febrero bajo la acusación de haber cometido un delito contra los derechos de los trabajadores.

Ese día, investigadores del Cuerpo Nacional de Policía, en colaboración con la delegación de Trabajo y Asuntos Sociales, procedieron a efectuar un control en un establecimiento propiedad de la detenida y comprobaron que en el local trabajaban empleadas extranjeras, procedente de Rumania, Colombia y Bolivia. Los agentes detuvieron a dos ciudadanas bolivianas de 20 y 47 años por encontrarse en situación irregular. A estas mujeres se les ha aplicado la normativa vigente que regula esas situaciones.

Por su parte, la empresaria arrestada ya ha sido puesta a disposición judicial. Esta mujer obligaba presuntamente a sus empleadas, que carecían todas ellas de cobertura sanitaria de la Seguridad Social, a realizar jornadas de trabajo de ocho horas diarias y los sábados de quince, con un descanso de media hora para comer, a cambio de un salario de 230 euros al mes.