La policía de Haití ha detenido a 10 estadounidenses que intentaban entrar en la República Dominicana con 33 niños haitianos, de edades comprendidas entre los 2 meses y los12 años. Las autoridades los acusan --cinco hombres y cinco mujeres-- de "robo" de menores.

Fueron detenidos el viernes por la noche en un paso fronterizo y desde ayer están arrestados en la Dirección General de la Policía en Puerto Príncipe junto a dos presuntos cómplices haitianos "Es una robo, no una adopción", dijo ayer el ministro haitiano de Asuntos Sociales y de Trabajo, Yves Christallin.

"Para que un niño pueda salir de Haití necesita una autorización del Instituto de Bienestar Social, que es el que se ocupa de las adopciones". Los detenidos carecen de documentos que acrediten que son huérfanos del terremoto y de haber sido adoptados.

Los 10 forman parte de una organización caritativa denominada El Refugio para una nueva vida para niños, de la iglesia Baptista, cuya sede está en EEUU, en Idaho.

Una de las detenidas, Laura Sillsby, negó ayer la acusación del Gobierno haitiano. Desde la celda que ocupa en la comisaría de Puerto Príncipe, Sillsby aseguró a la agencia Reuters que el terremoto destruyó el orfanato que la organización tenía en la capital.

Según relató, disponen de otro centro en República Dominicana y el fin era trasladarlos al país vecino. Sillsby dijo que tienen permiso para traer a los niños del Gobierno dominicano. "Nos están acusando de tráfico de niños. Esto es algo que nosotros jamás haríamos. No estábamos haciendo nada malo", afirmó.

Fue desmentida por Patricia Vargas, portavoz de la organización SOS Children que ha acogido a los menores en Puerto Príncipe. "La mayoría de los 33 niños aún tienen familia", aseguró. "Es una lástima que sean americanos los implicados en este asunto porque EEUU nos está ayudando mucho, como otros países", dijo el ministro.