La rociaron con disolvente y la quemaron viva. Rosario Endrinal Petit, una indigente de 51 años, murió el sábado tras agonizar durante casi dos días en el Hospital de Vall d´Hebron de Barcelona.

Tres jóvenes, dos de 18 años y otro de 17, la golpearon, patearon, insultaron y vejaron, la madrugada del viernes, y luego le prendieron fuego en el cajero de La Caixa de la calle de Guillermo Tell, en el barrio barcelonés de Sant Gervasi, donde dormía la mujer.

Los presuntos autores fueron detenidos entre el domingo y ayer. No pertenecen a ninguna banda, ni a grupo ideológico violento, ni a familias desestructuradas. Sólo uno de ellos tiene un antecedente sin relevancia de cuando era menor. Los tres son de Sarriá-Sant Gervasi, aunque uno vivía ahora con su padre en Zaragoza.

La brutal agresión, servida en capítulos, empezó a la una de la madrugada del viernes. Dos de los detenidos, los mayores de edad, entraron en el cajero automático donde dormía Rosario.

La grabación de la cámara de seguridad del cajero recoge cómo los dos jóvenes patearon, escupieron e insultaron a la mujer.