Los Mossos d'Esquadra detuvieron el 9 de febrero dos ladrones especializados en los robos con fuerza en tiendas ubicadas en grandes centros comerciales de Sant Boi de Llobregat y Sant Quirze del Vallès, según se ha informado ahora este cuerpo de seguridad. Los ladrones utilizaban el método del butrón para cometer los robos.

Los detenidos, de 28 y 40 años y de nacionalidad rumana, en pocos días al inicio del febrero habrían conseguido violentar seis establecimientos y se habrían llevado 8.000 euros en efectivo y 84 teléfonos móviles. Los ladrones reventaban los techos de los centros comerciales para acceder a través de los conductos del aire hasta llegar a las tiendas por un falso techo y así evitar la activación de las alarmas.

La investigación se remonta al pasado 5 de febrero cuando los investigadores tuvieron constancia de que se habían producido tres robos con fuerza en tiendas de un centro comercial de Sant Boi de Llobregat. En estos tres robos, los ladrones se llevaron 1.278 euros de cajas registradoras y 3.349 de una de las cajas fuertes.

La investigación

Las primeras pesquisas condujeron a los policías hacia dos sospechosos y un vehículo de alquiler con el que se desplazaban. Posteriormente, constataron que los ladrones se alojaban temporalmente en unos apartamentos de Gavà y el día 6 de febrero establecieron la vigilancia de los dos investigados.

El día 6 de febrero por la noche los investigadores observaron como los dos ladrones salían del apartamento con el turismo que habían alquilado y se dirigían al entorno de un centro comercial de la localidad de Sant Quirze del Vallès. Unas horas más tarde vieron como, ya de madrugada, volvían de nuevo al apartamento. El día 7 de febrero siguieron la misma rutina que el día anterior.

El día 8 de febrero los investigadores tuvieron conocimiento de la consumación de tres robos con fuerza en tiendas de telefonía en el centro comercial de Sant Quirze del Vallès. En esta ocasión, los ladrones accedieron sacando las placas de un falso techo que permitía ir hasta los almacenes de las tiendas y así evitar de nuevo que las alarmas se activaran. Se llevaron 3.300 euros y 84 teléfonos móviles.

La detención

El hecho de que hubieran actuado nuevamente provocó que los investigadores establecieran un dispositivo policial para su detención el mismo día 8 de febrero. Los agentes arrestaron uno de los dos hombres cuando conducía el vehículo de alquiler hacia el mediodía y el otro una hora después en el apartamento de Gavà.

Los agentes localizaron el vehículo dos intercomunicadores, una linterna y tres teléfonos móviles sustraídos de una de las tiendas. En el registro que se hizo en el apartamento los investigadores localizaron 79 teléfonos móviles y 7.470 euros. Además, uno de los dos detenidos llevaba 480 euros que, sumados, llegaban a los 7.950 euros, casi la cantidad exacta producto de los robos.

Además en el registro domiciliario también encontraron dos relojes y dos auriculares, sustraídos en uno de los robos de una de las tiendas de telefonía aparte de un plano manuscrito correspondiente a la ubicación de los establecimientos violentados en el centro comercial de Sant Quirze del Vallès.

Los dos ladrones acreditaron su identidad con cartas de identidad rumanas falsificadas, por lo que también se les atribuye un delito de falsedad documental. Los detenidos pasaron a disposición judicial el día 10 de febrero y el juez les decretó su libertad con cargos.