Después de un "minucioso trabajo de investigación", la Dirección General de la Policía (DGP) ha detenido en Barcelona, Madrid, Málaga y Granada a 18 ciudadanos de origen albanokosovar "muy violentos y peligrosos", acusados de realizar así 80 robos con fuerza en toda España. La mayoría de los atracos tuvieron lugar en chalets, cuando sus moradores estaban dentro.

Los arrestados también están acusados de sustraer vehículos y falsificar documentos. Los agentes sospechan que la red --que gozaba de una gran movilidad-- actuaba dividida en distintas células, compuestas por cuatro o seis personas. Ninguno de los atracos cometidos por la red albanokosovar tuvieron lugar en Catalunya, según revelaron ayer fuentes de la investigación. La mayoría fueron en Cádiz.

La organización tenía una infraestructura muy potente e inusual en otras bandas. Cada célula contaba con especialistas en conducción evasiva, apertura de cerraduras y cajas fuertes e inutilización de alarmas. Para ello, disponían de los instrumentos necesarios: visores nocturnos, walkie-talkies, cinceles, mazas, linternas guantes e inhibidores de alarmas.

Fuentes policiales explicaron que antes de actuar, la red estudiaba a la perfección el chalet o la nave que iban a atracar.