La Guardia Civil se incautó ayer de 60 kilos de cocaína en la operación contra el narcotráfico desarrollada en Valencia, en la que se ha desmantelado una red que introducía y distribuía droga y en la que han sido arrestadas 15 personas, entre ellas dos agentes de este Cuerpo.
Además de los dos guardias civiles del puesto de Tavernes Blanques, en la operación denominada Gorrión ha sido detenido también un policía local de Pedralba.
Los arrestados están acusados de ser presuntos autores de delitos contra la salud pública, cohecho, blanqueo de capitales y omisión del deber de perseguir delitos, entre otros. La operación fue llevada a cabo por el Servicio de Asuntos Internos de la Guardia Civil y el Equipo de Delincuencia Organizada y Antidroga de la Comandancia de Valencia.
La organización desarticulada pretendía introducir a través del Puerto de Valencia 60 kilos de cocaína ocultos en un contenedor. Las investigaciones se iniciaron hace 11 meses cuando la Guardia Civil tuvo conocimiento de la existencia de esta organización, cuyos miembros fueron identificados.
En los 11 registros domiciliarios practicados, la Guardia Civil ha intervenido además cinco pistolas, dinero en metálico, 10 vehículos de lujo y numerosos efectos relacionados con la venta y distribución de la droga.
Por otra parte, Agentes del Cuerpo Nacional de Policía detuvieron ayer en el aeropuerto de Barajas a tres personas que pretendían introducir en España más de seis kilogramos de cocaína ocultos en el interior del organismo y en dobles fondos de maletas, según fuentes policiales.
