Mohamed el Huarachi, el padre del bebé muerto por error médico, tenía reservado para mañana el billete de vuelta a Madrid cuando fue a Marruecos a enterrar a su mujer, la primera víctima mortal de gripe A en España. Una corazonada le empujó a adelantar el viaje una semana, lo que le permitió ver a su hijo Rayán aún vivo. Llegó a Madrid el sábado y el domingo murió el bebé. "Estaba hinchado como un globo, con la cara quemada", grita encendida Hafida, la abuela del pequeño y madre de Mohamed. Anoche tampoco durmió, porque desde que Dalila recibió sepultura apenas "coge el sueño". Dos muertes por lo que la familia juzga "dos fallos consecutivos". "¡Primero con mi nuera, y luego con mi nieto, que lo mata una enfermera suplente!", grita mientras llora de impotencia e indignación. "Y dicen que el Gregorio Marañón es el mejor hospital", añade Sadik, el abuelo de Mohamed. El fue el primero de la familia en emigrar a la soñada Europa --vivió más de 40 años en Madrid-- y el que abrió la era dorada al resto de la parentela. "Todos mis hijos y nietos son españoles, tienen nacionalidad española", dice. "El bebé tenía la cara de mi Mohamed", dice Hafida. Su hermano Abdalá la abraza. Luego se dirige al balcón, desde donde se avista el cementerio en que Dalila fue enterrada. "Era muy buena, simpática, guapa, la podían haber salvado", recuerda en su vivienda, en un barrio modesto de Mdiq, pueblo de origen de la familia Huarachi Mimouni.

La casa de Mohamed permanece abierta noche y día. La gente del pueblo acude a arropar a la familia mientras la televisión no se apaga para no perder detalle de las investigaciones abiertas en Madrid sobre la muerte del pequeño Rayán después de que una enfermera le diera alimentos por vía intravenosa. "El domingo por la noche muere, y hasta el día siguiente no informaron a mi hijo. Se lo pensaron demasiado ¿no crees?", critica la madre de Mohamed. En ese instante recibe una llamada de su hijo desde España. "Está harto, desquiciado, no puede más", añade antes de retirarse a descansar. Necesita reponerse para el entierro de hoy. El féretro de Rayán llega esta mañana.