La localidad cordobesa de Carcabuey está conmocionada por el ataque de dos perros de raza rottweiler a un hombre de 55 años, que falleció a causa de las heridas, y a su hijo, que permanece ingresado en estado grave. Los animales tenían la documentación en regla y se habían escapado horas antes de la quesería que vigilaban. El responsable de los canes, que había denunciado la desaparición, quedó anoche en libertad tras prestar declaración a la Guardia Civil. Está acusado de un delito de homicidio por imprudencia y otro de lesiones por imprudencia.

El fatal suceso se produjo la noche del jueves poco antes de las diez. El fallecido, F. G. R., cuidaba caballos en el picadero de su cuadra cuando fue atacado por un rottweiler de raza pura y otro mezclado con pitbull. Su hijo, extrañado ante la tardanza, fue a buscarle y también fue sorprendido por los perros. El joven, de 29 años, logró refugiarse en un establo y pedir ayuda.

Cuando los agentes llegaron tuvieron que ahuyentar a los perros para poder acceder a los hombres, a uno de los cuales encontraron ya muerto. Rápidamente avisaron al encargado de los animales, que había denunciado su desaparición esa misma mañana y que reconoció a los perros, al tiempo que ayudó a encerrarlos en una de la estancias de la finca.

Fuentes policiales explicaron que los dos rottweiler --incluidos en el listado de diez razas peligrosas de la Junta de Andalucía-- tienen toda la documentación en regla y cuentan con el seguro de responsabilidad civil y la cartilla veterinaria al día. Se encuentran en una perrera a la espera de que el juez decida si son sacrificados. Desde el ayuntamiento, administración encargada de controlar e inspeccionar las licencias de animales peligrosos, aseguran que nunca se había producido un incidente con dichos animales.

La víctima mortal de Córdoba es la quinta por ataques de perros que se registra en lo que va de año en España.