La utilización de toldos, persianas o voladizos es una buena opción para hacer frente al calor sin necesidad de utilizar el aire acondicionado. Son soluciones sencillas para reducir la radiación que entra en una vivienda, contenidas en un informe que ayer presentó Adena.

El informe señala que el abuso de los aparatos de aire acondicionado contribuye a agravar el calentamiento terrestre, puesto que requieren gran cantidad de energía que aumenta si la regulación no es óptima. WWF/Adena recomienda que se programe entre los 24 y los 26 grados y en ningún caso por debajo de los 22. Advierte que en ocasiones un ventilador que mueva el aire de una habitación es más que suficiente.

Con pequeñas mejoras en el aislamiento del edificio se puede disminuir entre un 25% y un 35% las necesidades de refrigeración y calefacción. Este porcentaje podría llegar al 80% si se dispusiese de un buen diseño bioclimático que tuviese en cuenta la ubicación geográfica, la orientación, el color y hasta la forma de un edificio.