El informe que cada año elabora Reporteros Sin Fronteras (RSF) sobre la libertad de prensa en el mundo constata que se ha registrado un notable retroceso en democracias consolidadas como EEUU y Japón. Los países europeos siguen encabezando la clasificación, aunque entre los 20 primeros se han estrenado países aún en vías de desarrollo como Bolivia y Bosnia, junto a Austria y Canadá. En la cola de los 168 países analizados por RSF, entidad que mañana recibirá el Premio Antonio Asensio de Periodismo, aparecen Corea del Norte, Turkmenistán y Eritrea.

Este último triángulo, que la ONG califica de "trío infernal de la libertad de prensa", viene precedido por Cuba, a la que considera "la segunda cárcel del mundo para los periodistas", puesto que más de 20 informadores han sido encarcelados.

La organización que vela por el respeto de la libertad de expresión alerta de que "mientras que los estados más represivos siguen siendo los mismos, países en desarrollo asoman en la cabeza de la clasificación, pasando con frecuencia por delante de democracias occidentales". EEUU, bajo la Administración de George Bush, ha descendido nueve posiciones, ocupando en la clasificación el número 53, junto a Botsuana, Croacia y Tonga. Japón ha descendido 14 puestos y se sitúa en el 51.

LA SEGURIDAD El retroceso del país norteamericano --que en el primer ranking de RSF, realizado en el 2002, ocupaba el puesto 17-- es atribuido a que, bajo el argumento de la seguridad nacional, el Gobierno "considera sospechoso a todo periodista que cuestione la guerra contra el terrorismo". También a que la justicia no admite el derecho a la confidencialidad de las fuentes, lo que ha motivado que una periodista que se ha negado a revelarlas esté en prisión. En el caso de Japón se imputa al "restrictivo" sistema de clubes de prensa y al "creciente nacionalismo".

RSF se declara "muy inquieta" por esta "lenta pero constante degradación" de la situación en EEUU y Japón, a la que se añade también Francia, que ha perdido 5 puntos en un año, y desciende al número 35 a causa de los registros en algunos medios, procesamientos a periodistas y las agresiones recibidas en los graves disturbios de las banlieues.

Aunque su retroceso es menor, de un punto, España ocupa el número 41, el penúltimo de la UE --le sigue Polonia--, debido a las amenazas de ETA a decenas de periodistas. Dinamarca, que en el 2005 fue el número uno del ranking, ha cedido el paso a Finlandia, Irlanda, Islandia y Holanda, y retrocede al puesto 19 a causa de las amenazas de islamistas por la publicación de una caricatura de Mahoma.