La campaña del departamento de Justicia de Estados Unidos contra los ciberdelitos empieza a dar visibles y ejemplificadores resultados. El fiscal general, John Ashcroft, anunció ayer que decenas de personas han sido detenidas en la operación Slam Spam, primer fruto de la aplicación de la ley aprobada en diciembre por el Congreso estadounidense para combatir el correo basura o spam .

Un día antes, el mismo departamento había anunciado los resultados de otra operación encubierta del FBI contra internautas que intercambian archivos, contra los que la Asociación de la Industria Discográfica de EEUU (RIAA) también ha intensificado sus acciones con 744 nuevas demandas en los tribunales.

La operación contra el denominado correo basura, que supone ya el 65% del correo electrónico y que sólo en EEUU provoca pérdidas de 8.000 millones de euros anuales, ha sido fruto de un año de trabajo de las agencias federales y compañías de internet. Los detenidos --que se enfrentarán ahora a fuertes multas y condenas de hasta cinco años de cárcel-- no sólo incluyen a los que llevan empresas que envían esos mensajes sino también individuos y grupos que están detrás de timos en internet que implican, entre otros delitos, el robo de datos personales y de tarjetas de crédito.

Esas redadas se registraron en Tejas, Nueva York y Wisconsin cinco casas y un proveedor de internet vinculado al grupo Underground Network. Esta es una red con cerca de 7.000 miembros que usan un programa punto a punto (P2P) llamado Direct Connect, que permite compartir archivos entre ordenadores.