A PARTIR DEL 4 de agosto casi todos los encendedores (excepto los llamados de antorcha) volverán a estar autorizados en el equipaje, según publicó ayer The New York Times. La prohibición del uso de los mecheros entró en vigor después de que el terrorista R. R, tratara de volar un avión con un explosivo escondido en los zapatos que intentó detonar con unas cerillas.

Según estadísticas del Departamento de Seguridad Interior, cada día se incautan en los aeropuertos estadounidenses 22.000 mecheros y deshacerse de ellos tiene cuesta unos tres millones de euros anuales. Las cerillas y pilas pequeñas siempre han estado autorizadas a pesar de quelas pueden usarse para detonar una bomba.