El atracador más buscado de España en las últimas décadas, Jaime Giménez Arbe "El Solitario", aseguró hoy en el juicio en el que compareció en Portugal que se "arrepintió en el último momento" de atracar un banco en este país y que su "lucha" es contra los bancos españoles."El Solitario", que fue detenido el 23 de julio de 2007 cuando se disponía a atracar un banco luso tras una larga carrera de asaltos en España, negó dos de los cinco cargos que pesan contra él en Portugal, la tentativa de atraco y la resistencia a la autoridad. "Era imposible que me resistiera porque tenía tres policías de 200 kilos encima", aseguró Giménez Arbe, que acusó a los agentes lusos de torturarle con descargas eléctricas y no identificarse como tales.

Los tres magistrados, dos hombres y una mujer, del tribunal de Figueira da Foz, la ciudad portuguesa donde fue capturado, que iniciaron hoy el juicio, le preguntaron varias veces sobre sus intenciones y las armas que llevaba encima. Pero Giménez Arbe sostuvo que nunca se acercó a menos de cincuenta metros del banco y que había cambiado en el último minuto de decisión porque tenía dinero suficiente y "una novia y un proyecto de vida en Brasil".

"El Solitario" fue condenado ya en julio en España a 47 años de cárcel por el asesinato de dos guardias civiles, pero aún tiene una larga lista de casi una treintena de atracos por los que responder ante la justicia española.

En su declaración de hoy aseguró que no sabe qué cargos tiene pendientes en España, donde fue juzgado sólo por una de sus acciones tras su entrega temporal -entre enero y julio de este año- por parte de las autoridades lusas, que no aceptaron extraditarlo hasta que responda de sus delitos en este país.

"El Solitario" está acusado también en Portugal de falsificación de documentos y tenencia ilícita de armas y municiones, cargo que no negó hoy tras admitir que llevaba encima una pistola y un revólver además de un subfusil -descargado según él- en una mochila.

Giménez Arbe justificó sus atracos a bancos porque "el poder real en España es el financiero", que, según él, es el responsable del desempleo, domina al poder político y despreciar al pueblo. "No me arrepiento de haber asalto ningún banco español, sólo me arrepentí aquí", subrayó el atracador. Agregó que era tanta la presión mediática sobre él que no podía luchar contra los bancos españoles y optó por ir a Portugal para que pensasen que había cambiado de país.

En sus alegatos "El Solitario" afirmó que no le parecía ético atracar en Portugal y que no tenía información sobre el dinero que había en el banco luso que se disponía a robar.

Por su parte, uno de los jueces le hizo ver que el establecimiento, una oficina de la Caja Agrícola en cuyas cajas había 160.000 euros, estaba a pocos metros de la sucursal de un banco español.

Giménez Arbe, custodiado siempre por un mínimo de tres policías, hizo la mayor parte de su declaración en una mezcla de portugués y español, aunque le asistía una traductora oficial cuya labor fue requerida varias veces por los magistrados. Tras un receso de hora y media, el juicio continua esta tarde con la comparecencia de una decena de testigos, la mayoría policías.