Una embarazada nigeriana de 35 años viajaba de Madrid a Palma en avión, acompañada de su hijo de 1 año y medio. Durante el vuelo, comenzó a sentirse indispuesta, hasta el punto de que sufrió convulsiones. Cuando el transporte aterrizó, una ambulancia trasladó a la afectada al Hospital Son Llatzer, donde los médicos le hicieron una primera exploración. Así, encontraron 15 dátiles de droga en la vagina de la mujer.

A través de unas radiografías, los profesionales que la atendieron descubrieron cuerpos extraños en el estómago, el colon y la zona abdominal. Se trataba de otros 53 dátiles, de modo que la ´mula´ portaba 1 kilo de cocaína en total. En ese momento, pensaron que alguno de los dátiles podría haberse roto y decidieron provocar el parto a la madre para "salvaguardar la vida del neonato y la de ella misma", explicó Janka Jurkiewitz, portavoz de la Policía Nacional, en rueda de prensa.

El pequeño salió "con alguna complicación", pero ahora evoluciona favorablemente. Los servicios sociales del Consell de Mallorca se hicieron cargo del otro hijo de la nigeriana, que fue trasladada este martes al módulo de detenidos del nuevo Hospital Son Espases. La Policía Nacional la acusa de un delito de tráfico de drogas.

Además, se le acusa de incumplimiento de la Ley de Extranjería, ya que estaba en España de manera ilegal, aunque no consta que tuviese una dirección en Palma o en otra ciudad. Lo único que se conoce, de momento, es que procedía de un vuelo de Madrid, que llegó a la capital balear entre las 22.00 y las 23.00 horas.

INFORMES MEDICOS Janka Jurkiewitz mantuvo que es "muy pronto" para decidir si también pudo cometer un delito de lesiones, porque aún no se sabe qué consecuencias pudo tener para el bebé que su madre trasladase la droga dentro de su cuerpo. Serán los informes médicos los encargados de delimitarlos.

El asunto se encuentra en fase de investigación y pasará posteriormente a manos del juez, que decidirá si la mujer debe ingresar en presión o si queda en libertad con cargos.