Las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI), causantes del cambio climático, descendieron un 8 por ciento en 2008 respecto al ejercicio anterior, según datos provisionales del Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino (MARM), que califica esta reducción como una "mejora histórica" a nivel nacional. Así lo definió hoy la secretaria de Estado de Cambio Climático, Teresa Ribera, que señaló que, a falta de los datos definitivos, con este descenso, el segundo desde la entrada en el Protocolo de Kyoto y muy superior al alcanzado en 2006 (algo más del 1 por ciento), las emisiones españolas de CO2 se situarán alrededor del 42 por ciento por encima de las registradas en 1990 (España debe situarse sólo un 15 por ciento por encima de estas emisiones en el periodo 2008-2012). Concretamente, Ribera explicó que las emisiones del sector de la generación eléctrica (responsables de más del 50 por ciento de las emisiones) se redujeron un 16,1 por ciento y las de los sectores industriales un 10,2 por ciento. Según la secretaria de Estado resulta "extraordinariamente estimulante" la evolución del sector eléctrico ya que aumentó su producción en un 1 por ciento al tiempo que experimentó tal descenso. En total, con datos definitivos y contrastados, ambos sectores, sometidos a la directiva europea de comercio de derechos de emisión, redujeron sus emisiones de CO2 un 12,4 por ciento y presentan un déficit del 5,9 por ciento al confrontar las asignaciones de derechos con las emisiones generadas (a falta de 11 instalaciones por facilitar las cifras). Estos datos, junto a los de los sectores difusos (transporte, agricultura, sector residencial...) que no adelantó, supondrían un descenso global de las emisiones del 8 por ciento. La secretaria de Estado atribuyó esta caída, "muy notable", al alto precio de los derechos de emisión de CO2, al precio de las materias primas energéticas y al precio de la tonelada de CO2 en el sector europeo. Menos emisiones por la crisis

Además, aunque la secretaria de Estado achacó esta reducción sólo en parte a la crisis económica, la caída en la producción en la industria de tejas y ladrillos, de azulejos y baldosas y de cemento, provocó la caída de las emisiones con respecto a 2007 en un 29,9 por ciento; en un 15,5 por ciento y en un 14,8 por ciento respectivamente. Asimismo, estas registraron una cobertura relativa a la asignación en 2008 del 56,4 por ciento la primera (tejas y ladrillos), del 27,6 por ciento la segunda (azulejos y baldosas) y del 24,9 por ciento la industria cementera. Con respecto a la reserva de derechos de emisión para nuevas instalaciones y ampliaciones de las existentes, fijada por el Plan Nacional de Asignación 2008-2012, la reserva de nuevos entrantes asciende a 31.385.000 derechos de emisión, es decir unos 6,27 millones de derechos al año. Ribera recordó que el Gobierno fijó el pasado 20 de marzo los dos primeros grupos de entrantes en el Plan Nacional de Asignación para ese quinquenio. El primer grupo de nuevos entrantes afecta a 62 instalaciones y supone un volumen de 12.588.146 derechos de emisión, es decir que ocupa el 40,1 por ciento de la reserva. Mientras, el segundo grupo de nuevos entrantes afecta a 15 instalaciones, con un volumen total de 3.258.096 derechos de emisión que representan el 10,4 por ciento de la reserva. En 2008 presentaron su extinción de autorización de emisión 27 instalaciones (un tercio de ellas pertenecientes a la industria de tejas y ladrillos), lo que supondrá entre 2008 y 2012 unos 2 millones de derechos de emisión que ahora pasan a la citada reserva de nuevos entrantes. En total el remanente en reserva sería de 16.557.801 derechos de emisión, equivalentes al 52,8 por ciento del fondo; es decir que hasta 2012 queda menos de la mitad (48,2 por ciento). No obstante, Ribera subrayó que, en su opinión, "no se puede pensar en que haya habido una sobre asignación".