La Policía Nacional continuaba anoche investigando el hallazgo del cadáver de una niña recién nacida, que no presentaba signos de violencia y estaba en el interior de una bolsa de basura en la planta de clasificación de residuos de Valdemingómez, que hay en Madrid.

Fuentes policiales informaron a Efe de que una operaria, que separaba los residuos reciclables de los que deben ser incinerados, encontró sobre las siete de la tarde del viernes el cuerpo del bebé, que correspondía a una niña nacida sólo unas horas antes --como máximo de un día-- y que aún tenía el cordón umbilical y la placenta.

En la bolsa se encontraron también ropas con restos de sangre, según las mismas fuentes, que señalaron que se iba a practicar la autopsia.