El debate sobre la prohibición del velo islámico en las aulas tomó ayer un nuevo cariz. La Federación Musulmana de España anunció que denunciará ante el Tribunal Constitucional la decisión del instituto Camilo José Cela de Pozuelo de Alarcón (Madrid) de apartar a Najwa Malha del centro escolar por vestir el hiyab en clase, ya que supone un "claro caso de islamofobia". Su secretario, Yusuf Fernández, sostuvo que este caso "puede ser ganado ante los tribunales", porque el rechazo de la niña por parte del consejo escolar del instituto supone una "aberración" que "viola y pisotea" los derechos que recoge la Constitución. "Es una norma que discrimina y que carece de cualquier validez legal", argumentó.

Fernández arremetió contra las declaraciones que realizó la ministra de Igualdad, Bibana Aído, el día anterior, en las que aseguraba que no le gusta ningún tipo de velo. "No se trata de lo que le gusta a una persona u otra. Si no le gusta que se ejerzan los derechos es su problema", subrayó. Sobre la opinión de la presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, de dejar la decisión de la expulsión de la joven en manos del consejo escolar del centro educativo, el secretario de la Federación Musulmana de España aseveró que "es una decisión equivocada", ya que la Constitución "ampara" a Nawja.

"DEBATE COMPLEJO" Aído matizó ayer sus declaraciones y pidió abordar el debate --"enormemente complejo"-- desde "el diálogo y el respeto". La ministra evitó entrar en otra polémica y detalló que aboga por "el respeto a las creencias, el respeto a quien quiere llevar velo, el respeto a la igualdad de oportunidades y de trato, el respeto a la autonomía del centro y el respeto a las competencias de las comunidades autónomas, que son las que la tienen en Educación".

Aguirre defendió la postura de su Ejecutivo con un ejemplo: "Si el reglamento de un centro dice que no se puede llevar la cabeza cubierta, ni los chicos, ni las chicas, ni las monjas, nadie, podrá llevar la cabeza cubierta. Lo mismo que en un centro no se podrá ir a clase en biquini porque lo dirá su reglamento".

La Comunidad de Madrid se reafirmó ayer en su postura en la polémica por el uso del velo. La Administración autonómica desestimó la reclamación presentada por el padre de Najwa al entender que el centro aplicó "correctamente" el reglamento interno, que prohíbe el uso de prendas que cubran la cabeza dentro de sus instalaciones.

Las compañeras de Najwa que desde el lunes le manifestaron su apoyo acudiendo a clase con el hiyab abandonaron ayer la iniciativa y fueron con la cabeza descubierta "por miedo y para evitar problemas". En la fachada del instituto aparecieron el miércoles pegatinas del partido de extrema derecha Democracia Nacional contra la "islamización" de España. Hadir Zerrad, padre de una de ellas, se mostró preocupado: "Las niñas van solas a clase y no queremos que les pase nada". Zerrad añadió que las chicas tuvieron "roces" con compañeros y que la propia Najwa les ha pedido que lo "dejen ya".

DERECHO A LA INTIMIDAD El de ayer fue el tercer día en que Najwa faltó a clase por la crisis de ansiedad que sufrió tras enterarse de que el consejo escolar iba a votar en contra de autorizar el velo en las aulas. La menor no ha decidido si aceptará el traslado a un centro donde el hiyab no esté prohibido. La secretaria de organización del PSOE, Leire Pajín, salió en defensa de Najwa y advirtió de que se está "colocando a una menor en el centro de la polémica, vulnerando su intimidad y contando toda su vida".