El hombre de 69 años que se encerró hoy en el Ayuntamiento de Cigales sobre las 9:00 horas y roció con gasolina parte de las dependencias para reclamar que un juez escuchase sus demandas, abandonó la medida de protesta poco antes de las 16.30 horas.

Néstor Caballero Vallejo, de 69 años, salió por la puerta principal del consistorio acompañado de un guardia civil, para subir a un turismo en el que había otros cuatro agentes del instituto armado, tras decir a los periodistas que ya se enterarían del motivo por el que decidió salir.

Media hora antes, los guardias civiles acortaron el cordón policial establecido por seguridad y Néstor Caballero se dejó ver en el balcón del consistorio, desde el que saludó a los vecinos que se encontraban en la Plaza Mayor. Parte de los presentes le aplaudieron y parte profirieron gritos de "fuera".