El consumo de drogas entre los adolescentes españoles sigue siendo preocupante, pero los últimos datos oficiales apuntan datos esperanzadores con un cambio de tendencia que fue imparable desde 1994 hasta el 2004. Desde hace tres años, según la última Encuesta escolar sobre drogas 2006-2007, el porcentaje de chavales de 14 a 18 años consumidores de cannabis ha bajado del 36,6% al 29,8%, y el de coca, del 7,2% al 4,1%. No obstante, aún hay un tercio que fuman porros y un 4,1% que esnifan, mientras que el alcohol se mantiene como la droga más consumida, sobre todo bajo la forma que el estudio cataloga de "atracón". Además, siguen iniciándose en las drogas a los 14 años, salvo en el tabaco, que se adelantan a los 13.

Casi la mitad de estos menores, que cursan la ESO, FP o Bachillerato reconocen haberse emborrachado alguna vez en el último mes, y el 53,4% admite haber tomado cinco copas o más en la misma ocasión, indica este macrosondeo de Sanidad, en el que han participado 26.454 alumnos de 577 centros, tanto públicos como privados.

BORRACHOS EN VEHICULOS El alcohol sigue siendo la droga más consumida entres los menores de ambos sexos, especialmente los fines de semana, e incluso cuando se desplazan con vehículos. A pesar de su corta edad, casi el 15% confiesa que ha conducido un coche o una moto bebido, y uno de cada cuatro, que ha viajado con conductores ebrios.

La investigación también parece dar la razón a la necesidad de una norma preventiva como la formulada por la anterior titular de Sanidad, Elena Salgado, abortada por la oposición del sector del vino y del Ejecutivo de Castilla-La Mancha. Dos de cada tres menores dicen que beben alcohol en espacios abiertos o practican el botellón y el 97% lo compra en súpers o hipermercados.

MENOS HUMOS El tabaco es la segunda droga de mayor consumo entre los estudiantes. Hacerlo de manera experimental, alguna vez en la vida "para ver cómo sabe", ha descendido de forma espectacular (más de 14 puntos). Fuentes de Sanidad lo atribuyen a la efectividad de las campañas y advertencias médicas sobre su poder adictivo desde los primeros cigarrillos. Fumar diariamente también ha caído pero --en contraste con la media europea del 18%-- todavía lo hacen casi el 30% de los estudiantes de 18 años.

En todos los casos ha aumentado la percepción del riesgo. En el tabaco se manifiesta en que tres cuartas partes de los fumadores se han planteado dejar el hábito y más de la mitad "están pensando seriamente en dejarlo". La sensación de peligro ante el cannabis, la droga ilegal más extendida entre los escolares, también se ha incrementado un 5% y, con respecto al alcohol, un 10%. La vicepresidenta del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, consideró que en este campo "las familias han tenido un papel clave". También subrayó el aumento de los encuestados que "consideran más difícil" acceder a las drogas.

También revela que el consumo entre los adolescentes tiene un carácter experimental u ocasional, vinculado la mayoría de las veces a la diversión. Una proporción importante tiene conductas de policonsumo.