La desaparición de la niña británica Madeleine McCann tuvo ayer un nuevo capítulo en los medios de comunicación lusos que indican que las escuchas telefónicas realizadas en el ámbito familiar y de amistades del matrimonio McCann fueron decisivas para concluir que la niña murió en el apartamento en el que dormía con sus hermanos gemelos de dos años. Además, la Policía portuguesa y la británica están rastreando la orilla marítima y han contactado con un especialista en corrientes marinas.

Diario de Noticias aseguró que la intercepción de comunicaciones --teléfonos móviles y fijos y correo electrónico--, realizada a los padres de Madeleine, Kate y Gerry, y a su núcleo familiar , "habrá sido determinante" para que los investigadores de la Policía Judicial (PJ) lusa y la británica concluyesen que la niña murió en el apartahotel en el que dormía con sus hermanos mientras sus padres cenaban en un restaurante cercano.

El mismo rotativo asegura que la Policía sigue centrando sus investigaciones en la zona de la Praia da Luz, donde desapareció la niña, y que hace al menos dos días que se realizaron, con el apoyo de los perros británicos y de la Guardia Nacional Republicana (GNR), nuevas búsquedas en tierra y en la orilla marítima, especialmente en la zona de Lagos. Este tipo de acciones, dice el diario que cita en todo momento a fuentes policiales sin identificar, se intensificaran en los próximos días. Sin embargo, hoy no se pudo verificar si estaban revisando la zona.

Además, la PJ ha contactado con un especialista en corrientes marinas, de la Facultad de Ciencias del Mar y Ambiente de la Universidad del Algarve, para saber cómo eran éstas en la Praia da Luz el 3 de mayo, cuando desapareció la niña, confirmó ayer el propio profesor que no quiso dar detalles.

El giro que se ha producido en la investigación de este caso ha llevado a que los padres y su círculo más cercano pasasen de ser víctimas a sospechosos, debido a las contradicciones en sus declaraciones y a la sangre encontrada en el dormitorio que compartía el matrimonio McCann.