El ministro de Asuntos Exteriores, Miguel Angel Moratinos, propuso ayer a una decena de países de Africa la negociación de acuerdos contra la inmigración ilegal que combinen la repatriación y la cooperación judicial con ayudas a la formación y al empleo. Moratinos formuló la oferta en una ronda de contactos bilaterales con ministros africanos, en el marco de un foro sobre legislación antiterrorista en Africa Occidental y Central convocado por la ONU.

Cuatro países --Cabo Verde, Guinea-Bissau, Guinea Conakry y Sierra Leona-- aceptaron de inmediato iniciar las negociaciones. Mauritania, país que está sirviendo de lanzadera para los cayucos que llegan masivamente a Canarias, se comprometió a reunir la próxima semana al comité mixto bilateral con el fin de buscar mejoras a los instrumentos de cooperación vigentes. Camerún, Benín, República Democrática del Congo, Angola y Guinea Ecuatorial aseguraron que estudiarán la propuesta.

CONTROL "IMPOSIBLE" El ministro consejero de la presidencia de Senegal, Serigne Diop, con quien Moratinos ya departió la semana pasada en París, pidió a España y a la UE que ayuden a su país a desarrollar sus capacidades de producción y exportación agrícola como mecanismo más efectivo para frenar la inmigración ilegal en Europa. Diop subrayó la voluntad de Senegal de reforzar la vigilancia de sus costas, pero avisó de que "no es posible" ejercer un control "total" de las fronteras.

Moratinos transmitió a sus interlocutores que España aumentará en los próximos tres años de 90 a 120 millones de euros su ayuda al desarrollo de Africa. España enviará el portaviones Príncipe de Asturias a unas maniobras de la OTAN de salvamento que comenzarán el 6 de junio ante las costas de Cabo Verde.