La gripe aviaria, tras la detección de casos en Grecia, Italia y Nigeria, está cada vez más cerca. La ministra de Agricultura, Elena Espinosa, reconoció ayer que evitar que pueda llegar un ave infectada sería imposible, pero advirtió de que el Gobierno "ha adoptado medidas de prevención suficientes y adecuadas" y tiene "toda la maquinaria a punto para responder si ahora mismo se registrase un caso". Para estudiar la nueva situación, se reunirá hoy la comisión interministerial y la titular de Medio Ambiente, Cristina Narbona, anunció que se redoblará el control en los parques nacionales.
"Lo que hay que hacer es mantener la máxima alerta. Todos protocolos de control están preparados", subrayó Espinosa, tras una reunión con los consejeros de todas la comunidades.
Espinosa explicó que todos los protocolos de actuación en caso de que el virus llegara a España están listos y permitirán aislar el foco. El plan prevé que en cuatro horas como máximo el Laboratorio Nacional de Referencia de Algete (Madrid) confirme un posible brote y adopte medidas eficaces. "Ocurriría, como en el caso de Italia, que a diferencia de Nigeria, se ha atajado y no ha ido a más", tranquilizó Espinosa.
HUMEDALES DE RIESGO La titular de Agricultura dijo que España no sólo ha puesto en marcha las medidas exigidas por la UE, sino que ha ido más allá y ha añadido ocho humedales a los 17 de riesgo que marcó Bruselas. El Gobierno aplicará medidas de bioseguridad en un total de
25 zonas, con 354 municipios, consideradas de mayor riesgo.
El plan contra la gripe aviaria, coordinado por Agricultura, prevé mantener la intensidad de los muestreos de aves, tanto domésticas como salvajes. Durante el año pasado se realizaron un total de 23.000 análisis (63 diarios). En lo que va de año se han practicado 4.004, lo que supone una media de 100 diarios. En el caso de Catalunya, según el Departament d´Agricultura, el año pasado se hicieron 2.000 análisis, con especial incidencia las zonas húmedas, como el delta del Ebro y los Aiguamolls de l´Empord .
Por el flanco sur, la delegación del Gobierno de Ceuta confirmó ayer que se han extremado los controles en la frontera de Marruecos para prohibir la entrada de aves y derivados (carne, huevos o plumas) procedentes de este país. La Junta de Andalucía reconoció que sus esfuerzos están centrados fundamentalmente en los humedales de Doñana, donde los animales podrían repostar para beber agua y descansar. El consejero de Agricultura de esta comunidad, Isaías Pérez Saldaña, anunció que elaborará un manual de información al ciudadano en colaboración con los ayuntamientos. "Estamos en situación de máxima vigilancia", subrayó Pérez Saldaña.
El conseller de Agricultura, Antoni Siurana, subrayó que si en Catalunya se registra un caso con origen en un ave migratoria, tendrá pocas posibilidades de extenderse ya que las aves de corral están muy controladas en explotaciones cubiertas.
