El gasto público en educación ha aumentado un 26% en la última década y el número de alumnos ha descendido en un 10%, pero sólo supone el 4,5% del producto interior bruto (PIB). Este porcentaje sitúa a España a la cola de los países de la UE y también por debajo del 4,9% dedicado en 1993.
Así un reciente estudio de la OCDE revela que el Gobierno del PP no ha aprovechado el crecimiento económico de los últimos años para impulsar las inversiones en educación. España ocupa en gasto por alumno el puesto 19. de un total de 28 países. Está muy lejos de Dinamarca, Suecia, Suiza y Noruega. Pero también detrás de otros países como Portugal, Polonia o Hungría.
Además, muestra que España gasta por universitario un 40% menos que la media de la UE.
