Los medios de comunicación para inmigrantes han dejado de ser aquellas pequeñas revistas y radios puestas en marcha de forma amateur por asociaciones de extranjeros. En tres años, su número se ha multiplicado y ha llegado hasta las 100 cabeceras y su fisonomía ha cambiado radicalmente. Si en el 2002 apenas había una decena de publicaciones, ahora las revistas dirigidas a inmigrantes alcanzan ya las 60 en España. Además, hay 25 radios y una quincena de televisiones incluyen en su parrilla programas para este colectivo. Entre ellas, destacan por su éxito Radio Gladis y Canal Latino TV.

La mayoría de estas publicaciones son periódicos profesionales editados por empresas privadas. Sus tiradas se han disparado y han transformado a esta prensa en un sector en expansión que atrae cada vez más a los anunciantes, los partidos políticos y los poderes públicos, conscientes de su influencia en un sector de población que crece y que podrá votar en las elecciones municipales del 2007.

Aunque algunas van dirigidas a los inmigrantes en general, muchas son para una sola nacionalidad. Chinos, rumanos, y ecuatorianos, entre otros, ya tienen revistas propias.

DIFUSION CONTROLADA La empresa Información y Control de Publicaciones, responsable de la Oficina de la Justificación de la Difusión (OJD), constata esa evolución. "En un año, hemos pasado de no controlar la difusión de ninguna de estas revistas a hacer el seguimiento a cinco", señala una responsable.

Algunas de esas cabeceras alcanzan tiradas significativas. Según la OJD, el semanario El Latino , sale ya con 79.600 ejemplares en toda España. Mientras, la revista Sí, Se Puede tiene una tirada de 51.000 ejemplares. Una muestra del crecimiento de esos medios es la revista Toumai , que en sólo seis meses pasó de tirar 20.000 ejemplares a 31.000.

Berta Gaya, especialista en inmigración y medios de comunicación, vincula este aumento al crecimiento de la inmigración. "Es un fenómeno de autorepresentación. Los inmigrantes crean una voz propia que les informa de lo que les interesa", explica Gaya, que llama a estas revistas "medios de la diversidad" y destaca que, al informar sobre el país de acogida, "fomentan la integración".

LEY DE EXTRANJERIA "Los inmigrantes buscan las noticias que les afectan", cuenta Carlos Gómez del Río, delegado en Cataluña de Latinoamérica Exterior. "Tenemos dos pilares: dar voz a los inmigrantes e informarles de lo que les interesa".

Todas esas publicaciones informan esencialmente sobre cualquier cambio legal en asuntos de extranjería, sobre todo las regularizaciones y la reagrupación familiar. Muchas traducen formularios a los idiomas de origen e incluyen en sus páginas consultorios de abogados sobre temas de extranjería.

Bogdana Maradjiiska, fundadora de la revista búlgara Nova Duma y de la rumana Noi ®n Spania , explica que otra sección básica es "la información sobre el país de origen". "Al estar en el extranjero --cuenta-- les interesa mucho saber lo que pasa allí".

"Informar de la actualidad española también es importante", dice Maradjiiska, que recuerda como detectó que sus lectores tenían dificultades en comprender asuntos como el Estatut o la ley antitabaco.

Otro caso es el de la decena de periodistas que huyeron de la crisis económica de sus países y siguen en España con su oficio, como son los casos de Ana Maria Cornila (Rumanía), el argentino Tomás D´ Espósito, Mi Yué, procedente de China, el peruano Marco Antonio Roldán y la búlgara Elina Kerelezova, todos ellos residentes en Barcelona.