José Luis Criado recuerda que ya era de noche, que "eran las cinco pero ya era de noche", y que en un sitio conocido como el paso de Los Elefantes "un grupo de bandidos militares, o de militares bandidos" los pararon, los hicieron bajar "a golpe de gritos y kalashnikov" y los llevaron con los otros, detrás de una duna.

Todo sucedió en enero de 1999: José Luis Criado tenía 41 años y hacía su octavo París-Dakar, en el asiento del copiloto de un camión que llevaba Jordi Jubanteny. Acabarían décimosegundos, pero lo que haría de ese rally difícil de olvidar es que acabarían secuestrados. En Mauritania. "Ese día retuvieron al 40% del rally. Creo que éramos unas 100 personas, había más de 30 camiones, unos 40 coches y entre 15 y 20 motos".

Tras seis horas de mucha tensión fueron liberados. Los secuestradores les quitaron todas sus pertenencias de valor y algunos de los vehículos del rally.

Según la Agencia Española de Cooperación Internacional, unos 1.300 españoles trabajan actualmente en proyectos de desarrollo y ayuda en el extranjero. En Mauritania, indicó una portavoz del organismo, operan un total de 20 oenegés españolas.

Por su parte, la treintena de voluntarios de Barcelona Acció Solidària, compañeros de los secuestrados, decidieron ayer en menos de una hora proseguir con la misión de la caravana solidaria hacia Senegal y Gambia.