El Prestige pasará una enorme factura a España. El comisionado del Gobierno para el caso del petrolero hundido, Rodolfo Martín Villa, cifró ayer entre 600 y 650 millones de euros (entre 100.000 y 108.000 millones de pesetas) el coste de la catástrofe, sólo en el capítulo de indemnizaciones.

A esta cifra hay que sumar el gasto en la recuperación de las zonas afectadas, los trabajos de limpieza en el mar y las labores de extracción del fuel.

En enero de este año, el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, había declarado que destinaría al menos mil millones de euros (más de 166.000 millones de pesetas) en dos años para la recuperación de la costa. Sin embargo, técnicos de diversas instituciones universitarias gallegas aseguraron que la repercusión económica del hundimiento del petrolero, sólo en el primer año, superaría los 2.000 millones de euros (más de 330.000 millones de pesetas), y que su coste total pasaría de los 4.000 millones.

FONDOS INTERNACIONALES

En el Congreso, Martín Villa insistió en que las indemnizaciones rondarán los 600 millones de euros. La mitad del montante está previsto que venga del Fondo Internacional por Daños de Vertidos de Hidrocarburos (FIDAC) y de la UE. El resto procederá de los procesos que el Gobierno ya ha iniciado contra el armador, la empresa dueña del Prestige , la de la carga y la que certificó su buen estado.

Martín Villa subrayó que en octubre el FIDAC dará su visto bueno para ofrecer las compensaciones económicas a España por la catástrofe, según explicó tras reunirse con el vicepresidente segundo del Gobierno, Javier Arenas, que sustituye a Mariano Rajoy en la coordinación de la comisión interministerial con competencias en el caso Prestige . El comisionado informó a Arenas acerca de los estudios realizados hasta ahora, así como de las cuestiones pendientes en materia económica, jurídica, de limpieza de playas y de extracción del fuel del pecio.

También destacó que las pruebas para extraer el fuel comenzarán a finales de mes. Si son satisfactorias, se realizarán las extracciones definitivas con bolsas lanzaderas en la próxima primavera. No podrá ser antes porque el oleaje en otoño e invierno podría dificultar las labores.

En caso de que las pruebas realizadas a finales de mes no ofrezcan un resultado satisfactorio, la empresa Repsol YPF --encargada de los trabajos-- pondrá en marcha un nuevo plan, que consiste en instalar una marquesina que cubra los restos hundidos.

Finalmente opinó que la situación es "muchísimo mejor o menos mala" que hace 10 meses.