Manaos, la capital del estado brasileño de Amazonas, acogió ayer la reunión de los nueve países amazónicos para buscar una posición común en la cumbre sobre el cambio climático de Copenhague. Brasil genera el 4,5% de las emisiones mundiales, lo que lo convierte en el quinto país emisor de gases contaminantes.

Brasil se ha comprometido a reducir sus emisiones en al menos el 36% para el 2020. Luiz Inácio Lula da Silva, el presidente brasileño, inauguró ayer un gasoducto de 661 kilómetros destinado a sustituir por gas el diésel usado ahora para ofrecer energía a Manaos, una ciudad con un total de 1,8 millones de habitantes.