Los vecinos de las zonas afectadas por el incendio que ha arrasado 26.672 hectáreas en Huelva y Sevilla, controlado desde el lunes aunque todavía no está extinguido, comenzaron ayer la recogida de datos y la evaluación de daños para cobrar cuanto antes las indemnizaciones planteadas por la Junta de Andalucía.
Las ayudas inicialmente fijadas para cubrir daños en enseres y viviendas, por un importe total de 700.000 euros, está previsto que puedan cobrarse antes de diez o quince días, por lo que los vecinos han comenzado a valorar las pérdidas sufridas, que en casos como Berrocal (Huelva) afectan tanto a casas, ganado o cultivos.
Mientras tanto, medio centenar de personas ultiman las labores de extinción del incendio, en una jornada en la que, por primera vez en cinco días, no trabajan medios aéreos.
Fuentes de Infoca explicaron que la situación del fuego no ha variado en las últimas 24 horas y se considera que está controlado, a la espera de sofocar completamente los últimos puntos calientes que quedan todavía a pie de tierra.
En las labores de extinción y vigilancia trabajan seis técnicos y agentes de Medio Ambiente, veinticinco especialistas en extinción y cinco vehículos autobombas.
Según los datos del Ministerio de Medio Ambiente, el fuego ha calcinado 26.700 hectáreas de superficie forestal, de las que 16.020 eran arboladas, 6.000 más que las calcinadas en todos los fuegos registrados en 1996, y se ha convertido en el peor siniestro de estas características en España de todos los registrados desde 1991.
