UN HOMBRE DE 61 AÑOS murió ayer en la Gigales (Valladolid) cuando, en el transcurso de un encierro, un toro rompió una valla del recorrido y se metió en el taller donde la víctima estaba trabajando. La cornada, en el glúteo, le produjo una fuerte hemorragia y la caída, un traumatismo en la nuca.