Un fallo técnico en el cambio de agujas es la causa más probable del accidente ferroviario del viernes, cuando dos Talgo que cubrían la línea Madrid-Galicia chocaron frontalmente en la localidad zamorana de Linarejos. De las 520 personas que componían el pasaje, 22 resultaron heridas, seis de ellas graves.

La hipótesis sobre el origen del siniestro la comunicó ayer el secretario general de Infraestructuras del Ministerio de Fomento, Antonio Monfort, en Zamora, donde detalló el fallo en el control de tráfico.

Montfort dijo que, desde el centro de control de León, se dio la instrucción para que el tren que venía de Galicia, con destino a Madrid, se desviara por una de las vías para no chocar con el que, en sentido contrario, estaba parado en una de las vías. Sin embargo, por motivos que se aún se investigan, el sistema falló y la orden al ordenador ubicado en León no se tradujo en el cambio de agujas. Pese a que ésta es la hipótesis más plausible, el cargo de Fomento apeló a la cautela. Monfort dijo que la línea A Coruña-Vigo-Madrid está automatizada desde hace 15 meses, y todas las operaciones de cambio de agujas se realizan desde el telemando de León.