Una nueva combinación de fármacos permite reducir casi a la mitad la principal causa de muerte en los enfermos de sida, el virus de la hepatitis C, según un estudio presentado ayer por el Instituto de Investigaciones Biomédicas Agustí Pi i Sunyer (IDIBAPS) y el Hospital Clínic de Barcelona. El descubrimiento dobla los resultados obtenidos hasta ahora, pero no reduce los efectos secundarios en los pacientes.

El doctor Josep Mallolas, de la Unidad de Enfermedades Infecciosas del Clínic, explicó ayer que "el 44% de los enfermos coinfectados con el virus del VIH y de la hepatitis C eliminan este último con un tratamiento que combina interferón pegilado alfa-2b y ribavirina", dosificado en función del peso del paciente.