El medicamento para diabéticos Mediator, utilizado también para cortar el apetito, ha causado 500 muertes en Francia durante los 33 años que estuvo en el mercado, según un estudio elaborado por la seguridad social dado a conocer ayer. El escándalo obligó al Gobierno a admitir que el sistema de vigilancia farmacológica no ha funcionado. El recién nombrado ministro de Sanidad, Xavier Bertrand, pidió a todas las personas que han consumido durante tres meses en los últimos 4 años este fármaco --que puede provocar una grave cardiopatía-- que consulten a su médico.

En Francia el mediator ha sido prescrito a dos millones de personas. Lo incomprensible es que no fue retirado del mercado hasta noviembre del 2009, cuando en EEUU dejó de comercializarse en 1997. En España la medida se tomó en el 2003 y no consta ninguna muerte asociada a su consumo, informó el Ministerio de Sanidad.

Según el diputado y cardiólogo Gérard Bapt, Francia es el último país que lo ha retirado de las farmacias creciendo considerablemente el número de afectados. Además del medio millar de fallecidos, 3.500 personas han sido hospitalizadas después de haber sido tratadas con el fármaco, fabricado por el laboratorio francés Servier.