El fiscal delegado de seguridad vial, Bartolomé Vargas, se mostró ayer partidario de que se modifique la ley para que "ni un taxista ni nadie" pueda transportar a un menor sin los sistemas de retención adecuados. Su propuesta implicaría que taxis y autobuses llevasen sillitas para los niños, algo bastante complicado de llevar a la práctica. "Es una utopía por la que hay que luchar", reconoció el representante del ministerio público.

Vargas explicó que, en colaboración con la Dirección General de Tráfico (DGT), está estudiando la posibilidad de modificar la legislación con el fin de que se adapte "a la convención de derechos del niño y a la ley de protección del menor".

Tras la entrada en vigor del reglamento de circulación que obliga a que los menores --hasta los 135 centímetros de altura-- viajen sujetos con la sillita correspondiente, el sector del taxi exigió a la DGT que les eximiera de esa responsabilidad, entre otras razones porque tendrían que transportar en el maletero los diferentes modelos, según la altura del niño, y no tendrían espacio para las maletas.

CONTRADICCION La DGT fue sensible a sus demandas y los taxistas están liberados de transportar los dispositivos. Eso sí, en desplazamientos interurbanos los padres tienen la obligación de aportar la sillita. "Hay una contradicción muy grande entre que se obligue a los padres a llevar los sistemas de retención y se exima a los taxistas, cuando cualquier conductor que lleve a un niño está obligado jurídicamente a su guarda", aseguró el fiscal. En los últimos cuatro años, no ha fallecido ningún menor ni en taxis ni en autocares, aunque sí ha habido heridos.

Tras el último encuentro de fiscales de seguridad vial, en marzo, Vargas desveló que el ministerio público va a comenzar a solicitar que sean declarados culpables de homicidio y lesiones imprudentes aquellos conductores que no hayan colocado el cinturón de seguridad o la sillita a un menor muerto o herido de gravedad por esta circunstancia. En el 2008, según los datos de Vargas, 40 menores (de 76 casos analizados) fallecieron por no ir adecuadamente sujetos.

MEDIDA DRASTICA El fiscal coordinador aclaró ayer que esta drástica medida se dirigirá sobre todo contra los automovilistas que no sean familiares del menor. "En el caso de un padre que además ha perdido a su hijo, nos lo pensaríamos mucho", dijo.

El presidente de la Confederación del Taxi de España, José Artemio, tachó de "absurda" la propuesta. "No es que no estemos de acuerdo sino que es logísticamente imposible que podamos trasladar los cuatro modelos de sillitas existentes", explicó.

Mientras, el experto en seguridad vial del Real Automóvil Club de España (RACE), Antonio Lucas, apoyó la petición del fiscal, si bien reconoció que es difícil de poner en práctica en los autobuses. En el caso de los taxis, propone que se solicite el servicio por teléfono para que el taxista pueda pasar por unos puntos de recogida a por la sillita adecuada. El RACE ofreció a la DGT sus oficinas para que los taxistas pudieran recoger las sillas.