La Capitanía Marítima de Algeciras ha abierto un expediente sancionador por dos presuntas infracciones a la empresa armadora de la gabarra monocasco Spabunker IV , que naufragó en la madrugada del martes en la zona portuaria de la bahía de la localidad gaditana.

La primera irregularidad detectada es que el buque navegaba con el despacho (autorización para salir a la mar) caducado, y la segunda, que llevaba una tripulación inferior a la legalmente establecida. La compañía armadora Ciresa Bunker tenía caducado el despacho desde el 3 de diciembre, según precisó el Ministerio de Fomento.

La Capitanía Marítima de Algeciras había dictado una resolución en marzo del 2002 que obliga a que la tripulación mínima de la gabarra fuera de cuatro personas, y en el momento del accidente eran tres, el capitán, el jefe de máquinas y un marinero.

EXTRACCION Y REFLOTE

La extracción de las más de mil toneladas de fuel que contienen los tanques de la embarcación comenzará la próxima semana y está previsto que los trabajos duren unos 10 días. El plan completo de rescate, que llevará a cabo la empresa británica Titan Marine, costará 3,8 millones de euros (632 millones de pesetas) y culminará el 21 de febrero.

Una decena de técnicos de Titan Marine están ya en Algeciras estudiando el proceso más favorable para extraer el fuel y reflotar la nave. Según sus cálculos, no podrán comenzar a succionar el carburante hasta dentro de una semana, a la espera de un buque especializado en rescates, que permitirá un mejor reconocimiento de la gabarra.

De momento, los buzos se han sumergido con escafandra autónoma, un sistema complicado puesto que el minipetrolero se encuentra hundido a 50 metros de profundidad, el límite para desarrollar este tipo de buceo.

La carga se extraerá pinchando una tubería al casco del barco que incorporará una válvula para evitar el derrame de fuel. El capitán marítimo de Algeciras, Alfonso Marquina, reconoció que la operación tiene riesgos, pero ha sido probada con éxito antes.

El Gobierno andaluz, por su parte, dio a conocer ayer el resultado de los primeros análisis, que confirman la ausencia de fuel. Según el informe, existe una incidencia "casi nula" en el medio marino y en la atmósfera, y los niveles de ph, conductividad, oxígeno e hidrocarburos son normales.

Aunque la bahía sigue limpia, la situación no es la misma a 10 millas del golfo de Cádiz. Varias manchas dispersas de chapapote han sido localizadas por investigadores de la Sociedad Española de Cetáceos. Por lo pronto se desconoce la procedencia de este vertido, que podría derivarse de la limpieza de los tanques de algún petrolero o, incluso, del Prestige .