Los interrogatorios de los jueces de instrucción y de la policía francesa se realizarán con luz, taquígrafos y, además, con cámaras de video. Permitiendo la filmación de las declaraciones de los detenidos, el proyecto de reforma de la justicia del Gobierno conservador de Dominique de Villepin sienta un precedente mundial en el proceso de instrucción judicial.

La decisión de grabar íntegramente (con imagen y sonido) los interrogatorios de magistrados y policías es el fruto más llamativo de la reforma del Ejecutivo francés. La modificación del sistema judicial se puso en marcha a raíz de los fallos detectados en el caso de Outreau, un fiasco judicial que conmocionó a Francia el pasado invierno.

Las torpezas cometidas por un juez, Fabrice Burgaud, recién salido de la escuela judicial en la instrucción de un caso de pedofilia llevó, en el año 2004, a 17 personas de la ciudad francesa de Outreau al banquillo de los acusados. Siete de ellos fueron absueltos en primera instancia y otros seis fueron exonerados en diciembre del 2005. Algunos son padres y madres de familia que fueron separados de sus hijos desde el día de su detención. Uno de ellos se suicidó antes de llegar a juicio tras clamar en vano su inocencia.

Cuando el Tribunal de Apelaciones de París se pronunció y anuló las penas --que iban de cuatro a 20 años de prisión-- el daño estaba hecho. Todos salieron de la cárcel con historias desgarradoras. Familias rotas, cuadros psicológicos maniaco-depresivos, personas hundidas en el rencor y la desconfianza en la justicia.

La mayoría de los inocentes --algunos no quisieron-- declararon ante una comisión parlamentaria seguida en directo a través de la televisión por millones de franceses. También el juez Burgaud. Muy pálido y al borde del colapso, el otrora arrogante magistrado acabó admitiendo haber cometido errores en la instrucción. Algunos garrafales, como realizar interrogatorios sin la presencia del abogado defensor del acusado. La opinión pública francesa descubrió con estupor que ni siquiera se podía sancionar al juez. El Consejo Superior de la magistratura no lo consideró oportuno.

VICTORIA DE SARKOZY Para prevenir catástrofes judiciales como ésta, el presidente del Gobierno ordenó la creación de un equipo de especialistas que preparara una reforma del sistema judicial. La decisión de filmar las declaraciones de los detenidos ante la policía y los magistrados ha sido fruto de una larga negociación entre los ministerios de Justicia e Interior.